La importancia de ser HACERTANTE (HACER que el otro se sienta imporTANTE)

(Artículo encontrado por un profesor y compartido en nuestro Claustro; a mí me llegó recientemente y me ha hecho reflexionar. GRACIAS)

Maria Graciani García. Ser “HACERTANTE” es un verdadero acierto. Consigues que las personas retomen la conciencia de sus mejores habilidades e incrementen su sentimiento de utilidad. Cuando una persona se siente útil y valorada como tal, sus hechos serán el fiel reflejo de esa valía.

Cuando vives en las almas y mentes de aquellos a quienes conoces alcanzas la inmortalidad creativa, te conviertes en fuente de inspiración de grandes ideas que se traducirán en las mejores actitudes y las acciones más fructíferas: ésta es una de las principales bondades del “HACERTANTE” (HACER que el otro se sienta imporTANTE).

Yo tenía 8 años cuando vi por primera vez a un “HACERTANTE”. En mi clase, 3ºE, del sevillano Colegio San Antonio María Claret éramos 40 alumnos (32 niños y 8 niñas) pero D. José Eugenio Bernabeu se las ingeniaba para sacar lo mejor de cada uno de nosotros. Yo siempre esperaba con ilusión el momento de reparto de los exámenes corregidos, pues D. José Eugenio no puntuaba con números, lo hacía con palabras, palabras de felicitación y de apoyo.

Corría el año 1994, quedaban unos días para Navidad y allí estaba, mi examen de Conocimiento del Medio: “Perfecto, no se puede hacer mejor” esa fue la puntuación que D. José Eugenio me otorgó. No os podéis imaginar el orgullo y la alegría con los que entré en mi casa ¡examen en mano! Desde niña mis padres me habían inculcado los valores de la superación, el esfuerzo y la excelencia, siempre había estudiado mucho y obtenido buenas notas, pero ninguna como las de D. José Eugenio. Las singulares “calificaciones” de mi profesor de 3º de primaria me nutrían de mayor autoconfianza, energía, creatividad… sentía la necesidad de continuar superándome, de querer ser la mejor versión de mí misma.

Como testigo de aquellos días, os he traído mi examen “Perfecto, no se puede hacer mejor”. Han pasado 18 años desde aquel momento pero aún lo guardo con cariño, es la prueba de la filosofía del “HACERTANTE” (HACER que el otro se sienta imporTANTE), quien ostenta la cualidad de la inmortalidad creativa –nada que ver con la física-, por la cual puedes estar presente en la cotidianidad de alguien aunque haga años que no os veáis en persona a la par que servirle de inspiración. Curiosamente, otra de sus bondades es la multiplicación del “acierto”, pues una vez que conoces a uno, tú mismo te conviertes en “HACERTANTE” para otras personas y ellas también lo serán para su entorno.

Siempre es buen momento para HACER que el otro se sienta imporTANTE, si bien empezar a practicarlo con los niños en edades tempranas tiene efectos extraordinariamente positivos en sus vidas de adulto, personal y profesional. Si se interioriza esta filosofía en la infancia, posteriormente en la Universidad, Másters, en la empresa en la que se encuentre trabajando aquel niño al que hicieron sentir importante, podrán disfrutar del efecto multiplicador del “acierto”, lo que implica grandes dosis de superación, creatividad, buen clima, cooperación, confianza y como culmen, excelentes resultados.

D. José Eugenio marcó la diferencia con los otros profesores al igual que la marcó en mi vida, su inversión fue intangible pero me ha reportado cuantiosos y cualitativamente preciados beneficios. Ya seas padre, profesor, directivo, estudiante… ¡recuerda la importancia de ser “HACERTANTE”! (HACER que el otro se sienta imporTANTE).